martes, 27 de septiembre de 2011

Peras en almíbar

¡Hola amigos! Este fin de semana estuve en mi pueblo. Allí, además de manzanas, con las que hice el dulce de la anterior entrada, ¡también tengo peras! 

Las llamamos "peras de invierno". Son de color canela, tienen una piel dura y resultan un poco insípidas para comerlas crudas, pero son ideales para hacerlas en almíbar, ya que al cocerlas se vuelven jugosas e incluso la piel está muy blandita y sabrosa.  Por ello no podía dejar de compartirlas con todos vosotros y aquí os las presento:


Aunque las traje directamente del campo, lógicamente las hay para comprar en cualquier frutería. Como ya apunté tienen un color marrón claro (en Asturias también escuché nombrarlas como "peres roxes") y para hacerlas en almíbar no han de estar muy maduras.

La receta es extremadamente sencilla:

Ingredientes:
-2 kg de peras de tamaño mediano
-1/2 l de agua
-5-6 cucharadas de azúcar (según el gusto de cada uno)
-1 palito de canela (opcional)

Preparación:
-Lavamos bien las peras y las ponemos en una olla junto con el azúcar, el agua y el palito de canela. Las cocemos 30-45 minutos aproximadamente, hasta que estén blanditas.

-Dejamos enfriar y ¡¡¡ya están listas para comer!!!

jueves, 15 de septiembre de 2011

Tarta de Manzana - 2

¡Hola amigos! No podéis imaginar cuanto hace que quería traeros esta tarta. Recordaba haberla comido de pequeña, pero no tenía ni sabía su receta. ¡Y por fin la conseguí, gracias a mi prima Ana!

No se trata de la típica tarta de manzana con crema pastelera que todos conocemos y que ya encontraréis aquí en otra entrada, si no que es una receta mucho más antigua. Es uno de esos postres que tanto me gustan a base de ingredientes sencillos.

Y no es que no me guste la cocina moderna e innovadora, ¡que también! Pero al mismo tiempo pienso que no se debe restar importancia a la tradicional, a la herencia culinaria de nuestras madres y abuelas, que, como ya dije en otras ocasiones, conseguían con pocos ingredientes y mucha imaginación hacer postres exquisitos. Podemos, por lo tanto, conjugar ambas cosas.


¡No dejéis de probarla, pues os encantará su sabor auténtico! La receta, un poco laboriosa pero nunca difícil, aquí os la pongo. Las medidas están calculadas para un molde de 30 cm, que es el tamaño de la que veis aquí.

Ingredientes para la masa:
-300 g de harina
-100 ml de aceite 
-100 ml de agua tibia
-1 sobre de levadura de panadería
-1 pizca de sal
-1 yema de huevo para pintarla

Ingredientes para el relleno:
-2 kg de manzanas golden
-300 g de azúcar
-300 ml de agua
-200 - 300 g de galletas molidas
-1 palito de canela

Preparación:
1.-Pelamos y troceamos las manzanas y las cocemos junto con el agua, el azúcar y el palito de canela. Las pasamos por el pasapuré y añadimos las galletas molidas. Debe quedarnos una masa con un poco de consistencia, por ello no puse la cantidad exacta de galletas, pues no todas las manzanas sueltan el mismo jugo.

2.-Hacemos la masa: mezclamos en un recipiente la harina, la levadura, el agua tibia, el aceite y la sal. Amasamos hasta que quede una pasta fina y compacta (5-10 minutos) y la dejamos en reposo cubriéndola con un paño húmedo unos 30 minutos (tiene que doblar su volumen).

3.-Pasado ese tiempo la estiramos con un rodillo y la colocamos en un molde que previamente untamos con mantequilla y enharinamos. Cubrimos la base y los laterales. Echamos el relleno extendiéndolo bien con una espátula, para que quede uniforme, cortamos la masa que sobra, con ella hacemos unas tiras y la adornamos. Por último, la pintamos con huevo batido (solo la masa) y la metemos al horno a 180º durante 45 minutos aproximadamente, pues tiene que quedar dorada.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Tarta para Villaviciosa (Tarta de tres chocolates)

¡Hola amigos! Hoy traigo una tarta dedicada a Villaviciosa. ¿Os preguntáis por qué? Pues os contaré el motivo: hace como un par de meses hice otra dedicada a Gijón, pero yo tengo mi corazón dividido. Por un lado está, como dice la canción... "este Gijón del alma al que tanto quiero..." (que es donde vivo) y por otro... "Villaviciosa hermosa, qué llevas dentro, tú me robaste el alma y el pensamiento..." (que es donde nací).

Como este próximo sábado comienzan las Fiestas del Portal, en la Villa, no podía  menos que dedicarle este postre, al que sin duda seguirán alguno más. Espero que os guste, lo hice con todo mi cariño. 




Para quienes lo desconozcan les diré que el dibujo del sombrero con las manzanas es una escultura preciosa que se encuentra en el parque, y al que hice numerosas fotografías para después poder realizarlo  en chocolate. ¡El sombrero de la tarta es comestible!

Se trata de un postre de tres chocolates (negro, con leche y blanco) que a mí personalmente me encanta. Como siempre, aquí os dejo la receta y espero que os animéis a hacerla y  me contéis los resultados.

Ingredientes para la tarta:
-150 g de chocolate negro
-150 g de chocolate con leche
-150 g de chocolate blanco
-125 g de azúcar
-750 ml de nata líquida para montar
-750 ml de leche
-3 sobres de cuajada.

Ingredientes para la base:
-150 g de galletas tostadas
-75 g de mantequilla
-2-3 cucharadas de leche

Preparación:
Mezclamos las galletas molidas con la mantequilla (a punto de pomada) y la leche. Hacemos una pasta, forramos con ella un molde para tartas desmontable y lo metemos en la nevera una media hora para que endurezca.

1.- En un cazo ponemos 150 g de chocolate negro troceado, 75 g de azúcar, 250 ml de nata y de los 250 ml de leche correspondiente sacamos un poco a un vaso para deshacer un sobre de cuajada. Llevamos al fuego y removemos bien para que no se formen grumos. Cuando empiece a hervir echamos la leche del vaso con la cuajada disuelta, seguimos removiendo hasta que hierva de nuevo y lo vertemos en el molde. Lo dejamos enfriar a temperatura ambiente hasta que cuaje (una media hora aproximadamente).

2.- A continuación hacemos lo mismo con el chocolate con leche, es decir: ponemos en un cazo 150 g de chocolate con leche troceado, 50 g de azúcar, 250 ml de nata y de los 250 ml de leche sacamos un poco a un vaso para deshacer otro sobre de cuajada. Lo llevamos al fuego, removemos bien y cuando empiece a hervir echamos la leche del vaso con la cuajada disuelta, y seguimos removiendo hasta que nuevamente hierva. Lo vertemos en el molde, sobre el chocolate negro y dejamos enfriar a temperatura ambiente hasta que cuaje (aproximadamente otra media hora).

3.- Por último tenemos el chocolate blanco. Y procedemos de la misma manera: ponemos en el cazo los 150 g de chocolate blanco troceado, 250 ml de nata, (aquí no echamos azúcar, pues el chocolate blanco es más dulce) 250 ml de leche, de la cual sacamos también un poco a un vaso para disolver la cuajada. Llevamos al fuego, removemos bien y cuando rompa a hervir echamos la leche restante con la cuajada. Seguimos removiendo y cuando hierva de nuevo retiramos del fuego y vertemos en el molde sobre el chocolate con leche. Dejamos enfriar a temperatura ambiente y luego la metemos en el frigorífico, si es posible, hasta el día siguiente.

La desmoldamos con cuidado y la decoramos a nuestro gusto. En este caso, puse el dibujo del sombrero con las manzanas que está hecho sobre chocolate blanco y que fue obra de mi amiga Mónica Rivero, que es una artista de los dibujos en chocolate.

Importante:
- Antes de echar el chocolate con leche sobre el negro ya cuajado, rallamos un poco con un tenedor y mucho cuidado la superficie. También hacemos lo mismo cuando echamos el blanco sobre el chocolate con leche. Esto es para que las partes queden pegadas y no se separen al desmoldarlas ni al cortar la tarta.

- Al verter el chocolate caliente sobre el que ya tenemos cuajado, es conveniente hacerlo sobre una cuchara vuelta del revés para que el chorro caliente se disperse y no nos haga un agujero sobre el que  tenemos en el molde.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Brazo de gitano (Brazu gitanu)

¡Hola amigos! El postre que traigo esta semana es antiguo e igualmente típico asturiano. Casi podríamos decir que era considerado de más categoría que cualquiera de las dos "Tartas de la abuela" que puse anteriormente, pues era más usual para las fiestas y también para momentos importantes o transcendentales, como reuniones familiares.



Recuerdo perfectamente la primera vez que lo vi, era una niña y me impresionó su forma, al no tratarse de una tarta típica redonda.

No dejéis de probarlo, pues os aseguro que está exquisito. Yo diría que se trata de esos postres de sabor auténtico.

Su elaboración es un poco más dificultosa o esmerada que otras pero que no se asuste nadie, pues pondré la receta paso a paso y al final, como siempre digo, lo más difícil resulta entretenido añadiendo paciencia.

INGREDIENTES:
Para el bizcocho:
-100 g de azúcar
-100 g de harina
-4 huevos
-1 sobre de levadura
-Un pliego de papel vegetal

Para el almíbar:
-250 g de azúcar
-500 ml de agua
-1 palito de canela

Para el relleno (crema pastelera):
-500 ml de leche
-125 g de azúcar
-50 g de harina de maíz
-3 yemas de huevo
-1 palito de canela

PREPARACION:
1.- Hacemos el almíbar: en un cazo ponemos al fuego  el agua, el azúcar y el palito de canela y lo dejamos hervir lentamente una media hora. Cuando enfríe lo colamos. 

2.- Hacemos el bizcocho: En primer lugar doblamos los cuatro lados del papel vegetal y ajustamos las esquinas para así hacer un molde (de papel) de 32 x 34 cm aproximadamente. Batimos las claras a punto de nieve. Asimismo, batimos bien las yemas con el azúcar, añadimos poco a poco la harina y la levadura y por último incorporamos las claras. Removemos con cuidado tratanto de evitar que nos queden grumos,  lo vertemos en el molde de papel extendiéndolo de manera uniforme y lo horneamos a 180º unos 15 minutos aproximadamente.
Nada más sacarlo, y con sumo cuidado para que no se rompa, lo enrollamos con el papel y lo dejamos enfriar así.

3.-Hacemos la crema pastelera: Hervimos la leche con el palito de canela para que le dé sabor. En un cazo  mezclamos las yemas de huevo con el azúcar y la harina y añadimos la leche caliente poco a poco. Lo llevamos al fuego hasta que hierva, removiendo todo el tiempo con una varilla. 

4.-Desenrollamos el bizcocho, lo remojamos con una tercera parte del almíbar, extendemos sobre él la crema y lo volvemos a enrollar, esta vez despegándolo ya del papel. Después recortamos un poquito los dos extremos para que nos quede más bonito y lo ponemos ya en una fuente. A continuación lo remojamos con el almíbar restante y ya por último lo espolvoreamos con azúcar glacé y lo decoramos a nuestro gusto (en este caso yo lo hice con chocolate)

Nota:
Aunque el relleno más tradicional es el de crema pastelera, también se puede hacer con chocolate, nata montada, flan, mermelada... etc.